La Organización Mundial de la Salud
(OMS) define la salud como aquel estado de bienestar físico,
psíquico y social, y no sólo como la ausencia
de enfermedad.
En este contexto, la enfermedad debe entenderse
como un proceso biológico que supone una alteración
estructural o funcional, un proceso psicológico que conlleva
sufrimiento y dolor, y un proceso social porque supone una invalidez.
La psicología médica estudia
las interacciones recíprocas entre procesos mentales
y salud fisiológica y considera todos aquellos aspectos
psicológicos presentes al enfermar, al recuperarse y
cómo se adapta el individuo a la enfermedad. Considera
que la salud y la enfermedad son atributos de la persona en
su totalidad y que así deben ser considerados por todo
médico. La vida psíquica desempeñaba un
factor importante en la salud y en la enfermedad.
Factores que intervienen en la Reacción
del Paciente con la Enfermedad |
Enfermar supone enfrentarse a un mundo hasta
entonces desconocido y negado. Todo individuo cuando enferma
experimenta una serie de reacciones emocionales ante la enfermedad
que el médico debe considerar. Existen muchos factores
que intervienen en esas reacciones, entre los que destacan la
personalidad del paciente, su edad, el tipo de enfermedad, la
familia y los amigos, el hospital y la personalidad del médico
y demás profesionales de la salud.
PERSONALIDAD DEL PACIENTE
Personalidades inseguras tendrán miedo
a perder el control sobre sus vidas;los pasivo-agresivos tenderán
a ser irritables y demandantes cuando enfermen.
EDAD DEL PACIENTE
Los adultos jóvenes tienen más
riesgo de reaccionar ante una enfermedad con resentimiento o
incredulidad, y de buscar diferentes opiniones con la esperanza
de que el diagnóstico original fuese una equivocación.
Los pacientes ancianos en general aceptan mejor sus problemas
médicos.
TIPO DE ENFERMEDAD
Las enfermedades del corazón, como
las arritmias o las enfermedades de las arterias coronarias,
producen mucha ansiedad y el miedo ante la muerte es constante.
Las enfermedades crónicas, como la insuficiencia renal,
artritis o diabetes, producen diversas respuestas que van desde
su aceptación hasta su negación, rechazando el
tratamiento.
FAMILIA Y AMIGOS
La complejidad de la dinámica familiar
afectará el comportamiento del paciente. Así,
por ejemplo, la ansiedad del esposo será transmitida
al paciente.
Aspectos Psicológicos del
Paciente Crónico, Ambulatorio y
Hospitalizado |
ASPECTOS PSICOSOMÁTICOS DEL ENFERMO
Las enfermedades somáticas generalmente
tienen un tiempo de incubación que varía de una
enfermedad a otra (8-15 días), los síntomas se
van instaurando paulatina y progresivamente o las manifestaciones
clínicas se manifiestan de manera aguda, en cuyo estado
de enfermedad experimentan una serie de reacciones físicas
y psicoemocionales de las cuales se puede describir:
- Disminución de energías físicas.
- Un sufrimiento físico localizado.
- Angustia, ansiedad y depresión.
- Temor a la soledad o invalidez y amenaza de
muerte.
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Algunos pacientes consideran su enfermedad
como una prueba para valorar su resistencia y como una prueba
para soportar el sufrimiento.
Otros pacientes la consideran como un castigo
a su actitud y comportamiento no muy adecuado para que les permita
reflexionar y adoptar una nueva actitud frente a su familia
y demás personas.
O es considerado como un hecho natural ya
que cualquier individuo está propenso a sufrir alguna
enfermedad en su convivencia con los riesgos de la naturaleza,
el medio ambiente en el cual vive.
La comprensión psicológica
del enfermo representa una tarea ineludible para todo médico
práctico. Para captar comprensivamente al enfermo, el
médico debe reunir varias condiciones, especialmente
estas dos:
- La de asumir una actitud psicológica
ante el enfermo.
- La de conocer teórica y prácticamente
las reacciones psicológicas a la enfermedad,
más comunes entre los enfermos.
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Actitud psicológica: Es una actitud
abierta, acogedora y expectante, desprovista de elementos subjetivos
y autoritarios y centrados en el acontecer de la personalidad
del otro. El médico se coloca entonces mentalmente en
la posición del enfermo, pero sin fusionarse con él.
Esta actitud resulta muy favorable para que
el enfermo se entregue más fácilmente a la comunicación,
la ventilación efectiva y la cooperación con el
médico.
Mediante la movilización de sus mecanismos
defensivos el yo trata de luchar contra la angustia y los temores
ligados a la enfermedad y se enfrenta con las frustraciones
inminentes a la misma, estableciendo nuevos modos de relación
con el mundo y consigo mismo.
MECANISMOS DE DEFENSA DEL INDIVIDUO CUANDO
ENFERMA
La enfermedad es uno de los acontecimientos
amenazantes, angustiantes, más importantes. Por eso,
el individuo cuando enferma pone en marcha los mismos mecanismos
de defensa que puede poner ante otras situaciones estresantes.
De ellos los más importantes son los siguientes.
1. Regresión
Se trata de una respuesta emocional en la
que el individuo abandona su independencia y determinación
y retrocede a estadios más precoces del desarrollo, cuando
eran pasivos y dependientes de otros.
2. Evasión
Se presenta como un rechazo de la realidad
actual por la creación de un mundo de fantasías
y sueños.
3. Agresión:
La movilización del acto agresivo
más frecuente consiste en proyectar sobre el médico
o el personal sanitario algunos incidentes desfavorables como:
el origen de la enfermedad y las posibles complicaciones; la
lentitud con que se produce el proceso de curación. No
están satisfechos nunca con los cuidados que se les proporciona.
Los sanitarios encargados de sección de enfermos deberían
recibir una preparación psicológica especial para
desmontar desde un principio estas conductas violentas y agresivas.
4. Inculpación:
La liberación de mecanismos auto punitivos
hace, que el enfermo se sienta culpable de su enfermedad y los
consiguientes trastornos y trata de aislarse. El médico
psicólogo ha de saber dar el cauce adecuado a la comunicación
de estos enfermos.
5. Negación.
Un individuo puede negar un acontecimiento
como una enfermedad negando que la padece, ocultando sus efectos
o actuando como si no tuviese ningún efecto. Se trata
de una respuesta emocional común ante la enfermedad.
Existen evidencias para afirmar que se trata de una respuesta
más común en los ancianos que en los jóvenes.
6. Represión y supresión:
La supresión es un proceso mediante
el cual el individuo realiza un esfuerzo más o menos
consciente para desviar del pensamiento todo aquello que es
desagradable. La represión es utilizada para rechazar
o no identificar de forma consciente aquellas sensaciones desagradables.
Los enfermos también pueden presentar
reacciones psicológicas a las enfermedades adecuadas
y convenientes. El conjunto de las reacciones adecuadas a la
realidad se sistematiza en estos tres grupos:
1) Las reacciones de superación de
la enfermedad: se caracterizan en una serena postura ante ella,
caracterizado por un auténtico deseo de curar y un alto
espíritu de colaboración con el médico.
2) Las reacciones impregnadas de resignación:
su nivel de iniciativa y de actividad psicomotora es mucho más
bajo que en el anterior.
3) Las reacciones de aprobación de
la enfermedad: El saber de lo ineludible exige la aceptación
de estar enfermo. Ese estado llega a ser inseparable de la propia
existencia.
- El mejor medio del que el médico dispone
para evitar el interferir las reacciones psicológicas
inadecuadas de los pacientes a la vivencia de la
enfermedad, es la actitud comprensiva y dialogante.
- La elevada proporción que causan estas
complicaciones neuróticas y depresivas, pueden
evitarse por una intervención médica
adecuada.
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ASPECTOS PSICOLÓGICOS DEL
PACIENTE CRÓNICO |
Hablar de un paciente crónico indica
que una persona sufre una enfermedad de larga evolución,
la mejoría de los síntomas es lenta, pasajera
y casi nunca está asintomático. El término
crónico tiene un efecto negativo tanto en los familiares
del paciente, la sociedad como en los médicos, quienes
no aceptan con agrado responsabilizarse en el tratamiento.
El paciente crónico en el seno familiar
origina tensiones, confusiones, desánimo y sentimiento
de culpa en sus familiares respecto a los cuidados que brindan
al paciente, situación que repercute en el estado general
del paciente crónico originando;
1. Necesidad de seguridad
2. Angustia de ser rechazado
3. Temor al abandono y a la soledad
4. Miedo a la invalidez
5. Desconfianza en el médico.
El primer contacto con los pacientes es la
admisión. El personal de salud que se encarga de la admisión
constituye un equipo (el equipo de Admisiones), son quienes
escuchan el pedido de consulta, siendo éste el primer
acercamiento de la persona que viene a consultar al Servicio
de Salud.
Todo paciente hospitalizado mantiene una
permanencia en el centro hospitalario. Terminada la internación,
si el síntoma de angustia estaba controlado o solucionado,
se lo enviaba a su hogar, pero si persistía, el paciente
pasaba a consultorios internos como paciente ambulatorio de
psicología o sicopatología.
¿Cuál es el papel del equipo
medico y la familia en estos momentos?
Información
La información es un aspecto muy importante
en cualquier etapa de la enfermedad. La información es
un proceso que mejora la adaptación a largo plazo pero
que provoca ansiedad corno efecto inmediato, sobre todo si se
comunican malas noticias.
Todos los síntomas que presenta el
enfermo crónico deben ser atendidos con detenimiento,
sean físicos o psicológicos. Entre los síntomas
físicos más incapacitantes y que requieren una
mayor atención se encuentra el DOLOR. Los síntomas
psicológicos varían en cada etapa de la enfermedad
como ya se ha descrito y pueden ser tan incapacitantes como
los físicos, por ello se recomienda hacer una prevención
de los mismos en tas etapas iniciales.
Calidad de Vida
La Calidad de Vida en el enfermo crónico
es una constante que hay que perseguir. No debemos olvidar que
el ser humano es un ser bio-psico-social y debe buscar el equilibrio
en cada una de las áreas para sentirse tranquilo y confortado.
Una buena información, junto a un adecuado control de
síntomas y percibir por parte del entorno el apoyo y
cariño necesarios, suelen mejorar en gran medida la "calidad
de vida" del enfermo, haciendo soportable cualquier sufrimiento.
Apoyo Social
Término que hace referencia a las
relaciones familiares y sociales de que dispone el paciente
y que colaboran de diferentes maneras en todo el proceso de
enfermedad. Desde un punto de visto psicológico, el apoyo
social que tenga el paciente es una variable predictora del
ajuste o adaptación a la enfermedad.
Ventilación Emocional
Expresar las preocupaciones y miedos que
siente el paciente, puede favorecer la disminución de
los niveles de ansiedad y que el enfermo se sienta más
tranquilo, así mismo nos da pautas para poder ayudarle
y mejorar su "calidad de vida". Existen técnicas
que facilitan el desahogo emocional, pero siempre han de ser
aplicadas por un profesional, cuando el caso lo requiere, ya
que el mundo de las emociones es complejo y podemos provocar
un daño en el paciente sino sabemos manejarlo.
RECAÍDA
O PROGRESIÓN DE LA ENFERMEDAD |
¿Cómo se vive una recaída
o progresión de una enfermedad crónica?
Un grupo de personas a las que se les diagnóstica
la enfermedad, tras un periodo de tiempo de completa normalidad,
vuelven a presentar problemas de salud relacionados con la misma.
La recaída o progresión de enfermedad, suele ser
una etapa difícil, en la que nuevamente es necesario
someterse a tratamientos médicos y revivir situaciones
que ocurrieron durante el proceso diagnóstico y tratamientos
iniciales. Esta fase se vive con mayor incertidumbre v desánimo.
Los motivos para ello los podemos resumir en los que siguen:
La experiencia anterior de enfermedad despierta
recuerdos y emociones negativas lo que condiciona que el paciente
sienta más miedo, se cuestione la aceptación de
nuevos tratamientos, y sobre todo que presente una serie de
reacciones emocionales que serán difíciles de
manejar: la desconfianza, la desesperanza y la impotencia.
Esta situación condiciona que tanto
el equipo médico como la familia contemplen una serie
de actuaciones que faciliten al paciente la aceptación
de lo que sucede, así como la toma de decisiones en cuanto
a la aceptación de nuevos tratamientos, segundas opiniones
etc.
EL TRATAMIENTO
PSICOTERAPÉUTICO DE LOS PACIENTES CRÓNICOS |
Contamos con experiencias controladas de
los efectos de las intervenciones psicoterapéuticas,
tanto Individuales cómo grupales, sobre la mejoría
de la respuesta a los tratamientos.
En un informe reciente se ha documentado
la prolongación del tiempo de vida en pacientes con enfermedades
crónicas de mama avanzado, qué habían participado
de dispositivos grupales; en otro se halló mejoría
en los parámetros inmunes en pacientes con melanoma en
estado inicial, quienes además tuvieron mayores intervalos
libres de recidivas. En general, están científicamente
documentados un aumento del tiempo libre de enfermedad, una
disminución de las recidivas y una prolongación
del tiempo de vida, en pacientes que han recurrido a la psicoterapia
como parte del tratamiento.
Cada individuo reacciona de manera diferente
tras ser ingresado en un hospital, dependiendo de la naturaleza
de la enfermedad, de su personalidad y de su situación
vital. Algunos pacientes lo interpretan como un lugar seguro
del que van a obtener cuidado y alivio en sus síntomas,
mientras que otras personas lo ven como un lugar que aumenta
su ansiedad. En comparación con su hogar, un hospital
es un ambiente impersonal, en el que a uno normalmente le despojan
de sus ropas, a menudo hay que compartir habitación con
otros y tiene que adaptarse a una nueva rutina, a horarios de
comidas, sueño y visitas, rodeado de un sinfín
de caras nuevas, cada una de ellas con una función concreta
que desarrollar.
INFORMAR AL PACIENTE
Cuándo el pronóstico es malo, ¿Qué
Información debe darse al paciente y como deben hacerse?
Existen 3 modelos:
a) Ocultar el diagnóstico y el pronóstico
al paciente.
La relación médico-paciente
es de carácter paternalista, con poca comunicación
entre ambos. En este modelo se asume que el paciente necesita
ser protegido de las malas noticias, o que no quiere conocerlos.
b) Informar sobre el verdadero diagnóstico
y pronóstico al paciente.
Con una relación también de
carácter paternalista, con una buena relación
entre ambos, pero en este caso el paciente es quien toma las
decisiones.
c) Comunicar el diagnóstico y el pronóstico
de forma individualizada. La comunicación médico
paciente es buena. En este modelo se asume que cada paciente
es distinto, que cada uno asume su enfermedad de manera diferente
y que la cantidad de información que desean es diferente.
En 1993, la División de Salud Mental
de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó
una monografía dedicada a cómo contar las malas
noticias al enfermo. Las conclusiones fueron las siguientes:
1. Antes de informar al paciente, el médico
deberá tener un plan. Es decir, deberá, haber
considerado cuál es la mínima información
que el paciente o los familiares necesitan saber para tomar
decisiones de cara al futuro y cuál es la máxima
información que se les puede dar en función de
la seguridad del diagnóstico (p. ej., cuando lleva un
excesivo número de pruebas diagnósticas).
2. Dar el control a paciente sobre lo que
quiere saber v cuándo lo quiere saber. Existe una amplia
evidencia tanto de la literatura como de la experiencia clínica
de que cuando a los pacientes se les presenta la oportunidad
dirán lo que quieren saber y cuándo.
3. El médico deberá averiguar
lo que el paciente piensa sobre su enfermedad. Deberá
preguntarle lo que él cree que le sucede y lo que le
preocupa. Normalmente el médico asume que el paciente
tiene miedo porque va a morir.
4. Permitir al paciente que se tome tiempo
para asimilar toda la información, es importante no sobrecargar
al paciente y ofrecerle la información en varias sesiones.
5. Dar alguna buena noticia o por lo menos
esperanza.
6. Ofrecer al paciente un plan de tratamiento,
aunque el médico no sepa con exactitud el diagnóstico.
Los pacientes se muestran muy agradecidos cuando ven que alguien
sabe lo que está haciendo y parece controlar la situación.
7. El médico nunca deberá dar
falsas esperanza o mentir, pues esto destruirá la confianza
en el médico, así como la relación médico
) paciente.
ASPECTOS PSICOSOCIALES DEL HOSPITAL
podríamos definir el hospital como:
Dentro del referido marco de una intervención
psicológicamente adecuada en los pacientes hospitalizados,
es preciso tratar de:
1. Frenar las molestias y disfunciones derivadas
de la enfermedad (lo que se puede llamar rehabilitación
y/o habilitación alternativa).
2. Evitar o retrasar complicaciones en los
cuadros instaurados.
3. Mantener al paciente con la máxima
autonomía, libertad e inserción en su entorno,
que sean posibles.
4. Mejorar la adaptación tanto del
paciente como de su familia (que no olvidemos que también
padece las consecuencias de la enfermedad y que, a su vez, influye
muchas veces decisivamente en la evolución del paciente)
a la situación de enfermedad.
5. Mejorar el cumplimiento de las normas
y controles de salud, tanto en sanos como en pacientes crónicos.
6. Implicar al paciente y a su familia tanto
en la situación de enfermedad como en su tratamiento.
7. Evitar la pasividad, la dependencia y
el conformismo.
8. Equilibrar, en cada caso, el reparto de
las cargas-beneficios consecuentes a la enfermedad entre todas
aquellas personas implicadas en esa situación de enfermedad.
9. Mejorar al máximo la calidad de
vida en todos aquellos aspectos en que ello resulte posible.
IMPACTO DE LA HOSPITALIZACIÓN SOBRE
EL PACIENTE
La propia situación de hospitalización
ya supone por sí misma una carga de ansiedad y unos problemas
importantes para todos los implicados (pacientes, familiares
y personal que desempeña su labor profesional), debemos
considerar la situación de enfermedad que padece el paciente,
complica aún más su situación y la hace
más dificultosa.
Esos pacientes se encuentran sometidos a
unas condiciones particulares, de entre las que destacan:
A) Un futuro personal en mayor o menor grado
temible e incierto, en relación con su bienestar, salud
y/o supervivencia.
B) Unos problemas materiales, económicos,
etc., derivados del internamiento.
C) Unas molestias físicas y psíquicas
deriva las de la enfermedad, de las exploraciones que ésta
conlleva y de los tratamientos que puedan resultar potencialmente
necesarios.
D) La ignorancia del motivo de algunas exploraciones
y de su peligrosidad, de los tratamientos que pudieran derivarse
de sus resultados, de la evolución que probable y realmente
va a seguir el cuadro, etc.
E) La dependencia de su bienestar, de su
sufrimiento y de su futuro, de unas personas desconocidas, con
una conducta generalmente aséptica e impersonal, que
no muestran estar especialmente motivadas afectivamente hacia él
de una forma concreta.
F) La consecuente separación familiar
y de su entorno físico habitual.
DIFICULTADES
INDIVIDUALES DE LA ADAPTACIÓN A LA HOSPITALIZACIÓN |
Dificultades de adaptación a la hospitalización
referidas a los hábitos personales del paciente
podríamos distinguir cuatro aspectos:
A) Alimentación
La hospitalización supone cambios
en este aspecto de la vida cotidiana del paciente, tanto en
lo que se refiere a horarios, cantidad y calidad, condimentación
o temperatura, como en lo que se refiere a la forma y postura
física en que se ve obligado a comer, al tipo de servicio
que se le proporciona para ello, etc.
B) Sueño
Aquí la necesidad de adaptarse se
plantea por los cambios que experimenta el sujeto hospitalizado
tanto en lo que se refiere a los horarios, como en lo que se
refiere a la comodidad física, en lo referente a las
interrupciones a que se le somete en el descanso por los compañeros
de habitación, ruidos y luces, tomas de medicación
propias o de los compañeros dentro del horario de sueño,
etc.
C) Higiene personal
Aquí las dificultades se derivan de
la necesidad de utilizar instalaciones generalmente inhóspitas
e incómodas, con un espacio físico inusual en
el que faltan los elementos habituales para el sujeto. Y que,
además, se ve obligado a compartir con personas extrañas.
D) Alojamiento
En este caso las dificultades se derivan,
obviamente, de las incomodidades que generalmente implica la
estrecha convivencia con personas extrañas, de costumbres
y gustos distintos, que la hospitalización impone.
Dificultades de Adaptación a la Hospitalización
Debidas a los Estilos de Vida del Paciente
A) Intimidad
Las dificultades se plantean aquí
ante la imposibilidad de hablar en privado de asuntos personales
o íntimos.
B) Independencia
Las limitaciones de la movilidad teniendo
que pedir permiso para casi todo lo que en la vida habitual
se hace libremente, con imposibilidad de control o de toma de
decisiones.
C) Atuendo
Aunque pueda parecer poco relevante, resulta
también molesto para el paciente el tener que permanecer
constantemente, durante el tiempo que dure la hospitalización,
con ropa de noche, generalmente manteniendo la uniformidad que
impone el hospital y muchas veces con inadecuación de
tallas, de planchado.
DIFICULTADES DE ADAPTACIÓN A LA HOSPITALIZACIÓN
DERIVADAS DE LAS EXPECTATIVAS DEL SUJETO
A) Hacia sí mismo
La expectativa del sujeto hacia sí
mismo como paciente implica que debe )ser bueno). Y ello significa
que debe ser dócil y hasta heroico si es menester. Debe
obedecer ciegamente las indicaciones que se le hagan, sin rechazar
en ningún caso tratamientos, dietas o manipulaciones.
B) Hacia la enfermera
La enfermera es una figura profesional que
despierta en el paciente expectativas ambivalentes. Por un lado,
sabe que es una persona que no debe dejarle morir, pero que
tampoco debe darle información ni su opinión,
que no debe dejarse guiar en su actuación por su conciencia
sino por su obligación, que tiene acceso a toda su intimidad
pero que no debe divulgar la información.
C) Hacia el médico
Esa es una figura que en el hospital, más
que en ningún otro sitio, es magnificada e idealizada.
No se le debe enjuiciar ni molestar con preguntas, no debe eludir
las decisiones últimas sobre cuál es la mejor
atención, tiene en su poder la capacidad de indicar o
suspender un tratamiento.
El Funcionamiento
Hospitalario un Campo de Aplicación de la Psicología
Médica |
Es un lugar de cuidados.
Pero es también un lugar de búsqueda
que deberá concernir a todo el campo de la psicología
médica.
Finalmente es un lugar que posee unas características
de funcionamiento propias, diferentes de las de la medicina
práctica.
1. Características de la hospitalización
A. La hospitalización acentúa
algunos rasgos de la relación asistente-asistido.
Y contribuye a desequilibrarla en detrimento
del enfermo;
B. La hospitalización implica un funcionamiento
de grupo en los asistentes.
2. La aportación médica a las
dificultades vinculadas a la hospitalización.
A. Las posibles respuestas a los efectos
traumáticos de la hospitalización.
Puede bastar con pequeños gestos como
apretar la mano, decir el nombre, explicar la naturaleza y razones
de las diferentes gestiones para que el clima psicológico
cambie considerablemente y que la angustia vaya normalizándose.
Tres grandes principios podrían guiar
siempre la actitud de los asistentes cualquiera que sea la naturaleza
de su función:
- Personalizar la relación.
- Tener presente la función organizadora
del asistente, siendo coherente en su actitud y
explicando el sentido de lo que se realice.
- Permitir al enfermo tener un papel activo.
|
Dicha actitud tendrá tanto mas eficacia
de formar parte del comportamiento habitual de los asistentes.
B. Las distribuciones de la relación
de grupo en el hospital
Que se quiera o no, que sea deseado o temido,
el funcionamiento de un servicio hospitalario implica unas relaciones
de grupo. Nosotros hemos subrayado la importancia y consecuencias
sobre la naturaleza y la calidad de la relación médico-paciente
(asistente-asistido) y sobre la circulación de la información.
C. ¿Cómo mejorar la calidad
de la comunicación del grupo asistente?
Algunos principios pueden guiar su acción:
Todos los miembros del grupo deben comprender
el interés de una buena comunicación, condición
para obtener su adhesión y motivación.
Las actitudes en el seno de un grupo son
contagiosas y tienen un variable ejemplar. Podemos así
advertir que las enfermeras se comportan a menudo con los enfermos
de una forma parecida a la que los médicos adoptan para
ellos.
Toda información que viene de cualquier
persona debe poder ser dicha y ser oída sin desvalorización
ni ironía.
La comunicación, para mantenerse no
se debe hacer en sentido único. Un mínimo de información
debe venir en reciprocidad a todos los asistentes sobre el sentido
de su acción, la importancia de sus informaciones y las
consecuencias que han tenido.
D. La humanización de los hospitales
pasa por la aplicación de estos principios
Quien dice humanización significa
en efecto el deseo de tener en cuenta necesidades verdaderas
de los enfermos. No son únicamente materiales, pero implica
tener en cuenta unas necesidades psicológicas y de la
personalidad de los enfermos.
Humanizar es reintroducir lo humano en el
funcionamiento del hospital, es decir, evitar que este último
no sea reducido al papel de fábrica a reparar los órganos
averiados. Todo lo que hemos podido decir del vínculo
entre psique y soma nos muestra su importancia,
Humanizar significa permitir a cada enfermo
seguir viviendo como un ser humano.
Teniendo en cuenta sus valores de referencia.
Solicitando en la mayor medida el conjunto
de sus posibilidades de funcionamiento, no solo fisiológicas
sino también mentales.
Evitándole que se desorganice a través
de la angustia.
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